Ver tema anterior :: Ver siguiente tema |
Autor |
Mensaje |
J.M. RodrÃguez Pardo
Registrado: 10 Oct 2003 Mensajes: 1423 Ubicación: Gijón (España)
|
Publicado: Lun Ene 30, 2006 1:04 pm Título del mensaje: Estrategias |
|
|
Estimados amigos:
Precisamente la E de PSOE pesa más de lo que se piensa, y tildar de antiespañoles a los miembros del PSOE puede servir para volver la acusación por pasiva: es que sois demasiado exigentes con el PSOE, dado que los pactos con el PP están descartados. Y a mà me parece que apelar al descontrol y falta de norte del PSOE frente a la serenidad y firmes principios del PP es hacer ese «caldo gordo» que algunos nos han atribuido anteriormente: el PSOE sigue adelante y el PP se muestra en la encrucijada, sin saber muy bien qué hacer.
Respecto al Referendum que quiere convocar el PP sobre el Estatuto, será oportunismo o todo lo que se quiera, pero no le queda otro remedio, porque cualquier acción que lleve un sello inequÃvoco deja fuera de juego al PP: si se limitan a dejar a Piqué en Cataluña, se entenderÃa como claudicación; si sólo convocan el referendum, entonces quedan automáticamente marginados por los demás. Pero dejando a Piqué en Cataluña y convocando el referendum ganan puntos ante quienes no apoyan el Estatuto, al tiempo que se preparan para eventuales pactos con CIU. Yo no pienso que vaya a ser la solución final, pero otras opciones son peores.
Un cordial saludo,
José Manuel RodrÃguez Pardo. |
|
Volver arriba |
|
|
J.M. RodrÃguez Pardo
Registrado: 10 Oct 2003 Mensajes: 1423 Ubicación: Gijón (España)
|
Publicado: Mar Ene 31, 2006 4:32 pm Título del mensaje: ArtÃculo de PÃo Moa |
|
|
Estimados amigos:
Sin querer alargar en exceso este debate, me gustarÃa añadir aquà un artÃculo de PÃo Moa en Libertad Digital, donde le reconoce al PP razón en sus planteamientos, pero infinita torpeza a la hora de llevarlos a la práctica, algo que desde luego no es exento respecto del debate que estamos aquà manteniendo.
Un cordial saludo,
José Manuel RodrÃguez Pardo.
Cita: | Ganar la iniciativa
PÃo Moa
Dada la emocionalidad que inevitablemente provoca la serie interminable de insolencias y provocaciones del Iluminado de la Moncloa y sus aliados separatistas y terroristas, es fácil perder la perspectiva general de la situación y caer en disputas parciales que enturbian la visión de conjunto. De hecho viene ocurriendo con el PP. Este partido ya mostró en la última campaña electoral su capacidad para ponerse a la defensiva cuando tenÃa todo a su favor, arriesgando, aun antes del 11-M, perder la mayorÃa absoluta e incluso la mayorÃa. Y ahora ofrece un espectáculo parecido al que Demóstenes achacaba a los atenienses: “peleáis como los bárbaros, que cuando les golpean llevan las manos a proteger la parte golpeada, y cuando reciben un nuevo golpe en otro lugar allà acuden sus manos, porque no saben pararlos ni vigilar la táctica contrariaâ€. DifÃcilmente cabe imaginar un partido con más razón y más razones de su lado, y tan poco hábil para defenderlas.
La mayor tara de la democracia en estos treinta años ha sido la inaplicación de la Constitución y sus libertades en las Vascongadas y, en menor pero creciente medida, en Cataluña. La asignatura pendiente del régimen consistÃa en extender a esas regiones la democracia. En 2003 Jaime Mayor Oreja mostró en una clarividente conferencia que sólo una estrategia de fortalecimiento democrático, con aplicación de la ley y las libertades a las Vascongadas y Cataluña, y garantÃa de sus usos en todo el paÃs, podÃa consolidar los logros de la Transición. Por desgracia su partido fue incapaz de tomar la iniciativa en esa dirección, y el mismo Mayor Oreja se vio marginado.
La indecisión o el oportunismo del PP han terminado propiciando el actual proceso involutivo: son las formas liberticidas de hacer polÃtica impuestas en Cataluña y Vascongadas las que se están imponiendo en todo el paÃs. Ello significa la sustitución del vasto consenso polÃtico y popular en torno a la Constitución, por acuerdos intrigantes entre grupos de polÃticos irresponsables, torpedeando la Constitución mediante hechos consumados. Ninguno de los chanchullos resultantes podrá obtener la lealtad y respeto ganados por la Constitución más consensuada de la historia de España. De hecho estamos cayendo en una polÃtica a la latinoamericana, donde los votos se utilizan corruptamente contra la ley y la libertad. Entramos en un nuevo perÃodo de inestabilidad, si no paramos a tiempo el proceso.
¿Podemos pararlo? Las fuerzas para ello están ahÃ, en la sociedad, abrumadoramente superiores a las contrarias. Pues la inmensa mayorÃa desea, sin lugar a dudas, vivir en una nación unida, democrática y estable, condiciones para asegurar la prosperidad, una influencia adecuada que proteja nuestros intereses en el mundo de hoy, y el desarrollo de nuestra cultura, que ha conocido épocas gloriosas. Pocos españoles, en cambio, apoyarán el plan diseñado por la funesta alianza de demagogos, separatistas y terroristas, que consiste y sólo puede consistir en un “Estado español†impotente, convertido en un amasijo de seudo naciones fundadas en el odio a España, con ciudadanos de primera y de segunda, y la mancha de un terrorismo legalizado en su origen, resentidas entre sÃ, internacionalmente irrelevantes, peones de las intrigas e intereses de potencias más fuertes, e incapacitadas para afrontar nuevos peligros como los del islamismo radical.
Tal es la elección de nuestros dÃas, después de treinta años de democracia. ¿Será posible desmantelar el artificio de falacias con que la siniestra alianza intenta cegar a la población sobre sus intereses y las consecuencias de tales planes? ¿Será posible superar las respuestas “bárbarasâ€, como decÃa Demóstenes, y encauzar la formidable fuerza partidaria de la unidad y la libertad para frustrar los planes contrarios? Es indispensable que asà ocurra. Pero ello no depende del PP, o sólo de él, sino de toda la sociedad.
|
|
|
Volver arriba |
|
|
|
|
No puede crear mensajes No puede responder temas No puede editar sus mensajes No puede borrar sus mensajes No puede votar en encuestas
|
Canal rss servido por el trujamán de la comunicación electrónica y digital © 2003 - 2007 Trujamán
|